Las Mayorías Silenciosas

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Richard Nixon expresidente de E.U. Dijo una vez: “Si la voz de una minoría, por ferviente que sea en su causa, se impone por encima de la razón y el deseo de la mayoría, esta Nación no tiene ningún futuro como sociedad libre”.
La Biblia dice : “¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!”

‭‭Isaías‬ ‭5:20‬. ‬‬‬

Siendo que en las redes sociales y apoyados por los directivos de Facebook, Twitter y YouTube entre otros, además de algunos medios de comunicación ( especialmente en tv), hay una campaña agresiva del grupo minoritario, por no decir minúsculo, LGBT, para imponer la agenda gay en nuestro país, con la complicidad manifiesta de algunas personalidades del gobierno nacional ( entre ellos: la primera dama actual, la vicepresidenta y canciller, el procurador de la administración, el alcalde del distrito capital, etc); y ante el silencio de la gran mayoría de la población que está en contra de esta práctica, me ha parecido bien alzar mi voz a través de este escrito, para motivar a esa mayoría a no callar más, elevando a la vez su voz y llamando bueno a lo bueno y malo a lo malo. Si hacemos una especie de balance sobre lo dicho por el expresidente Nixon hace décadas y comparamos la sociedad norteamericana de hoy vs la de ayer, llegaremos a la conclusión de que Nixon tenía la razón absolutamente.
Estudios indican que la población homosexual mundial es de entre un uno y un seis por ciento; los países que aceptan el matrimonio gay, alcanza apenas una veintena, entre alrededor de 200, cifras que nos demuestran que el grupo LGTB es una minoría que pretende imponernos y obligarnos, vía ley a que aceptemos su antinatural estilo de vida, que además es inmoral para la mayoría de la sociedad. Pero la pregunta que debemos hacernos entonces es, por qué este grupo minúsculo ha tenido tanto éxito? La respuesta es sencilla: Por el silencio de las mayorías y el dominio de este grupo en los medios de comunicación y en las redes sociales.
Hablando específicamente de Panamá, la proyección gay ha avanzado y se ha enquistado en algunos centros de poder, como lo son: el despacho de la primera dama, el municipio de Panamá, en despacho de la vicepresidenta y la cancillería, además de la procuraduría de la administración. Esto puede haber atemorizado a muchos, si además le sumamos a los más importantes canales de televisión. Ahora, la campaña gay ha declarado al mes de junio cómo mes del orgullo LGBT, y para eso izó en plaza Catedral la bandera de este grupo, so pretexto del reconocimiento de la diversidad sexual, con la complicidad silente y el auspicio de las autoridades, tratando de imponernos su distorsionada visión de vida y sexualidad; campaña agresiva no solo en su proyección, sino en la acción individual de este grupo, agrediendo a los que se oponen, señalándoles de discrininación, homófobos y términos peyorativos para intimidarles y obligarles a callar. Lo cierto es que el mes de junio no es ningún mes del orgullo gay, sino todo lo contrario, en Panamá, junio es reconocido como: El Mes de la Familia panameña, gracias al aporte de la Iglesia Católica que impulsó el establecimiento de la Semana de la Familia, en nuestro país. Este esfuerzo da como resultado el Decreto No 56. del 22 de junio de 1977, que indica que sea celebrada en la tercera semana de junio, comenzando con el Día del Padre. Entonces, porqué las mayorías no alzamos nuestras voces para celebrar y promover el mes de la Familia, dejando que la minoría nos imponga la celebración de algo que atenta contra la familia y contra nuestros principios y valores? Por que las mayorías no se unen para defender esos principios y valores? Por que las mayorías guardan silencio ante este tipo de corrupción (sexual)? Por que silenciar la verdad permitiendo que la mentira y la irracionalidad prevalezcan? Por que las mayorías callan frente a temas como el aborto, el matrimonio gay, la adopción de niños por homosexuales y la ideología de genero? Y por que las mayorías han callado ante el abuso de algunas autoridades que han utilizado su puesto para tratar de imponer la agenda gay con los propios recursos del Estado? En mi opinión por varias razones: 1. Por desconocimiento: de la fuerza de la unidad (debemos unirnos), y muchas veces por el desconocimiento de la verdad siendo que el ocaciones el grupo minoritario (LGTB) nos venden mentiras como si fueran verdades, (como por ejemplo la idea de que en la mayoría de los paisés del mundo es aceptado el matrimonio gay como algo normal), y eso es totalmente falso. Desconocimiento también de Dios y de su palabra que dice: Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libre, Jn.8:32; 2. Temor: a ser juzgados por nuestras opiniones, posiciones y valores. Miedo también a la critica y el disenso, y miedo a represarias y repercuciones sociales, empresariales y económicas. 3. Por el concepto erróneo de que ese (esos temas) no es mi problema: esta posición es inocente, siendo que la moralidad es un asunto de todos.
Todas las mayorías silenciosas deben saber que cuando la verdad calla se impone la mentira, cuando calla la razón se imponen los disparates, cuando calla la decencia se impone la inmoralidad y que cuando los buenos callan se imponen los malos.
Por todo lo antes escrito, hago un llamado para que la mayoría de nuestra nación nos unamos alzando nuestras voces en los medios de comunicación, en las redes sociales, y en cualquier lugar donde traten de imponernos acciones o costumbres anti naturales e inmorales, para decir la verdad, para llamar a lo bueno, bueno y a lo malo, malo. La familia, verdad, la razón, fe, los principios y valores de nuestra sociedad debe ser defendida con vehemencia por la gran mayoría de personas normales que entendemos que la homosexualidad es un acto ilógico, anti-natural e inmoral. Toda persona tiene derecho a elegir su propia inclinación sexual, pero no tiene derecho a imponer a la mayoría lo que es malo como si fuera bueno y menos a hacer silenciar a esa mayoría, descalificándola con calificativos peyorativos por su opinión o posición . Personalmente no tengo nada contra ninguna minoría, pero las sociedades civilizadas y democráticas se rigen por el voto, voluntad y consenso de las mayorías. La biblia dice que al que sabe hacer lo bueno y no lo hace es pecado. Santiago 4:17, además, cuando conoces la verdad, escuchas las mentiras y callas, ese silencio te hace complice y esa complicidad te hace culpable. Por esta razón debemos abandonar toda actitud pasiva y temerosa (cobarde) y actuar con valor, determinación y dignidad, defendiendo nuestros principios, valores y derechos, para que esta nación se distinga en el futuro como una sociedad libre, fuerte y consciente de Dios, su palabra y los valores. Las mayorías no debemos hacer más silencio, ya que esto hace que las minorías nos impongan su voluntad por muy disparatada que sea. No calle más y defienda su punto de vista, fe, posición u opinión. Dios les bendiga.

Rev. Leonardo Bailey

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